Las colinas de Castelli Romani-Alban son los restos de un gran volcán conocido como volcán Laziale. Su territorio es rico en ambientes muy diversos: colinas fértiles ocupadas por viñedos y olivares, zonas montañosas escarpadas cubrieron de espesos bosques de castaños, praderas, lago Albano y lago de Nemi y numerosas ciudades históricas y sitios arqueológicos de gran interés. La gastronomía de los Castelli Romani siempre ha sido popular en el panorama regional y nacional: sólo piensa en el picnic tradicional fuera de la puerta principal habitantes y los visitantes a Roma en las mesas de cerveterane castellane. Grottaferrata y Ariccia son conocidas para el turismo culinario, la primera ubicación de los restaurantes donde se puede comer cocina típica romana, el segundo gracias a cerveterane, fenómeno cultural que caracteriza al país. Frascati, en cambio, es famoso por cocina elite, ante la presencia de varios restaurantes de gran prestigio a nivel regional; Sin embargo, prestigiosos locales han extendido a todos los Castelli Romani.